La temporada del 1953/54 no comenzó bien pero al final, teniendo como entrenador a Amadeo Sánchez, llamado «El Gigante Asturiano», consiguió ascender en el último partido jugado en el estadio de Bardín que fue pequeño para acoger a todos los aficionados que fueron el día 27 de junio del 1954, los cuales quisieron estar presentes en el partido contra el Osasuna.