Diego Simeone (1970 – ): El Cholo es tan importante en la historia de la Selección que fue el primer jugador en alcanzar los 100 partidos con la camiseta celeste y blanca, allá por marzo de 2001. Después de pasar por las categorías juveniles, debutó en la Mayor en 1988 y se mantuvo en el equipo de manera casi ininterrumpida hasta 2002, en un período en el que disputó 3 Mundiales, cuatro Copas América (ganó las de 1991 y 1993), ganó una medalla de plata Olímpica (1996) y se consagró en las Copas Confederaciones 1992 y Artemio Franchi 1993. Con 104 presencias, actualmente está quinto en la lista de apariciones en el combinado nacional. Oscar Ruggeri (1962 – ): Además de haber sido campeón del mundo en 1986, el Cabezón es el último capitán argentino en haber levantado un trofeo con la Selección, en la Copa América de 1993. Con cuatro títulos (ganó también la Copa de las Confederaciones 1992 y la Copa América 1991) y un subcampeonato del mundo en 1990 es uno de los futbolistas más galardonados de la historia de la Albiceleste y figura séptimo en el listado de los jugadores con más presencias en el combinado nacional, con 97 presencias.
Fernando Redondo (1969 – ): Uno de los futbolistas más elegantes que jamás haya vestido la camiseta del combinado nacional, cuya historia en la Selección fue mucho más corta de lo que su categoría merecía (apenas disputó 29 partidos), por cuestiones meramente extrafutbolísticas. Claudio Paul Caniggia (1967 – ): El Pájaro es uno de esos futbolistas cuya trascendencia en la Selección supera ampliamente a lo que hizo a nivel clubes: jugó durante 15 años con la camiseta celeste y blanca, desde su debut en 1987 hasta su retiro en 2002, en los que disputó 50 partidos y marcó 17 tantos. Con su gran juego aéreo y su liderazgo, el defensor marcó una época y al combinado nacional le costó mucho llenar el vacío que dejó tras su retiro. Su gol a Brasil, en los octavos de Italia 1990, es uno de los goles más celebrados de la historia del combinado nacional.
Es el máximo goleador argentino en la historia de los Mundiales y séptimo en la tabla general, con 10 tantos entre sus participaciones en 1994, 1998 y 2002. Además, durante 14 años fue el máximo goleador de la historia de la Albiceleste, con 54 tantos en 77 partidos (para un enorme promedio de 0,70 goles por encuentro), camisetas de futbol hasta que en 2016 fue superado por Lionel Messi. El jujeño fue el enganche de la Selección durante 8 años y ni siquiera su increíble expulsión frente a Holanda en los cuartos de Francia 1998 empaña su gran paso por el equipo. A partir de la edición de 1993 el sistema volvió a cambiar, y los clasificados de cada grupo juegan cuartos de final, semifinales y un partido final para definir al campeón del continente. Después de haber ido al Mundial de 1994 con apenas 20 años, el Burrito tuvo la difícil tarea de heredar la 10 de Maradona luego del certamen en Estados Unidos y estuvo a la altura de las circunstancias. El Ratón debutó en la Mayor en 1994 con 21 años bajo el mando de Alfio Basile como entrenador.
Estuvo 17 años en el combinado nacional desde su debut en 1994 hasta su último encuentro en 2011, en los que disputó 143 partidos y se convirtió en el jugador con más presencias, hasta que este año lo superó Javier Mascherano. El ex astro del fútbol cantó y bailó con los jugadores en los vestuarios, después del encuentro. Jorge Valdano (1955 – ): Hasta ser una pieza clave del equipo campeón del mundo en 1986, a los 31 años, el santafesino no había tenido una historia particularmente destacada en la Albiceleste. La alineación se basó en el equipo de 1978, con la incorporación de Diego Maradona (que había ganado un título nacional jugando en un nivel alto) y Ramón Díaz, que junto a Maradona había salido campeón con la sub-20. Con 35 goles en 64 partidos es el cuarto artillero histórico del combinado nacional y el segundo máximo goleador de las Eliminatorias Sudamericanas, con 19 gritos. Roberto Ayala (1973 – ): Además de ser el cuarto futbolista con más partidos en la historia de la Albiceleste, con 114 presencias, el Ratón es el último gran marcador central de la Selección. René Houseman (1953 – 2018): El Loco jugó solamente seis años con la camiseta de la Selección, entre 1973 y 1979, pero dejó su huella indeleble.
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